4/10/11

Me llaman Octubre, no pretendas saber más de mi.

Ojalá tuviera un corazón de mimbre. De los que se doblan antes que partirse. Y una sonrisa, también.
Ojalá no esperara tanto de la gente, o al menos no esperara lo mismo que yo doy. Haré una norma. Siempre menos. 
Ya sólo espero que esto pase. No espero ni siquiera que sea pronto. Ni tengo esperanza de que sea de una manera agradable. Pero mis lágrimas ya no saben donde ir. Mis dudas inundan todo mi ser. El corazón me pesa, y el alma tiembla. 

Acepté, hace tiempo, que nunca llegaría a brillar con luz propia, y aún así duele. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribir una entrada lleva su tiempo, y agradezco mucho cualquier comentario que hagáis sobre ella, siempre que sea respetuoso.
Prometo contestar todos los comentarios (lo más pronto posible!)

Saludos!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...